La enfermedad es un conflicto entre la personalidad y el alma. Muchas veces...
El resfrío "chorrea" cuando el cuerpo no llora.
El dolor de garganta "tapona" cuando no es posible comunicar las aflicciones.
El estómago "arde" cuando las rabias no consiguen salir.
La diabetes "invade" cuando la soledad duele.
El cuerpo "engorda" cuando la insatisfacción aprieta.
El dolor de cabeza "deprime" cuando las dudas aumentan.
El corazón "afloja" cuando el sentido de la vida parece terminar.
El pecho "aprieta" cuando el orgullo esclaviza.
La presión "sube" cuando el miedo aprisiona.
Las neurosis "paralizan" cuando el niño interior tiraniza.
La fiebre "calienta" cuando las defensas explotan las fronteras de la inmunidad.
Las rodillas "duelen" cuando tu orgullo no se doblega.
El cáncer "mata" cuando te cansas de vivir.
¿Y tus dolores callados? ¿Cómo hablan en tu cuerpo?
La enfermedad no es mala, te avisa que te estás equivocando de camino.
Me parece bonito compartir este mensaje:
EL CAMINO A LA FELICIDAD NO ES RECTO.
Existen curvas llamadas EQUIVOCACIONES
Existen semáforos llamados AMIGOS
Luces de precaución llamadas FAMILIA
EL CAMINO A LA FELICIDAD NO ES RECTO.
Existen curvas llamadas EQUIVOCACIONES
Existen semáforos llamados AMIGOS
Luces de precaución llamadas FAMILIA
Y todo se logra si tienes:
Una llanta de repuesto llamada DECISIÓN
Un potente motor llamado AMOR
Un buen seguro llamado FE
Y abundante combustible llamado PACIENCIA.
Una llanta de repuesto llamada DECISIÓN
Un potente motor llamado AMOR
Un buen seguro llamado FE
Y abundante combustible llamado PACIENCIA.
(Gracias Cris Salazar)
De: Pablo Nissi